Ingredientes de origen natural
Hoy en día, la demanda de cosméticos naturales está aumentando drásticamente. Cada vez son menos los consumidores dispuestos a exponerse a las oscuras masas de ingredientes sintéticos que componen la cosmética convencional actual. Si opta por la alternativa natural, pronto descubrirá que no siempre cumplen lo prometido. Hemos recopilado una visión general para usted:
Cosmética convencional: En esta categoría se incluyen todos los productos que la ley aprueba para uso cosmético, ya contengan hormonas, provoquen alergias o incluso contengan sustancias potencialmente cancerígenas (Lea más aquí).
Cosméticos «libres de…»: El hecho de que un producto declare que no contiene una determinada sustancia no garantiza que el ingrediente utilizado para sustituirla sea inocuo para la salud. Véase cosmética convencional.
Cosmética vegana: No implica automáticamente que estos productos sean de origen natural. Los cosméticos veganos pueden contener varios componentes artificiales que también se encuentran en los productos cosméticos convencionales. La única diferencia es que los cosméticos veganos no contienen sustancias de origen animal.
¿De dónde proceden los cosméticos?
El primer contacto con la cosmética se remonta al antiguo Egipto, donde el maquillaje era un símbolo de riqueza que atraía a los dioses. El elaborado delineado de ojos característico del arte egipcio aparecía en hombres y mujeres ya en el año 4000 a.C.
¿Qué es el origen natural?
Antes de entrar en materia, sólo queremos precisar que los ingredientes «naturales», los ingredientes «de origen natural» y los ingredientes «ecológicos» proceden de la naturaleza. Esto significa que proceden de organismos vegetales, animales o microbianos.
¿Qué significa cosmética natural?
Normalmente, el término «natural» implica que los fabricantes no utilizan ingredientes químicos derivados sintéticamente al crear sus productos. En su lugar, los científicos diseñan la fórmula utilizando ingredientes químicos de origen natural. Independientemente del origen de los ingredientes, todos los cosméticos se formulan con ingredientes químicos.
La civilización egipcia también inventó la peluca.
Los ejemplos y la perspectiva de este artículo se refieren principalmente a Estados Unidos y no representan una visión mundial del tema. Puedes mejorar este artículo, discutir el tema en la página de discusión o crear un nuevo artículo, según corresponda. (Noviembre de 2017) (Aprende cómo y cuándo eliminar este mensaje de plantilla)
La historia de la cosmética abarca al menos 7.000 años y está presente en casi todas las sociedades del planeta. Se afirma que el arte corporal cosmético fue la primera forma de ritual en la cultura humana. La prueba de ello son los pigmentos minerales rojos utilizados (ocre rojo), incluidos los lápices de colores asociados a la aparición del Homo sapiens en África[1][2][3][4][5][6] Los cosméticos se mencionan en el Antiguo Testamento (2 Reyes 9:30, donde Jezabel se pinta los párpados, aproximadamente en el 840 a.C.) y en el libro de Ester también se describen varios tratamientos de belleza.
En la antigua Roma también se utilizaban cosméticos, aunque gran parte de la literatura romana sugiere que estaban mal vistos. Se sabe que algunas mujeres de la antigua Roma inventaron maquillajes que incluían fórmulas a base de plomo, para blanquear la piel, y kohl para delinear los ojos[7].
Qué es la cosmética natural
Para definirse ecológico, un cosmético debe contener un mínimo del 95% de ingredientes orgánicos y no debe haber compuestos de origen petrolífero, parafina, formaldehído ni colorantes de origen sintético. Los cosméticos ecológicos no sólo lo son en su composición, sino también en su envase, ya que todos se fabrican con materiales reciclables y biodegradables.
Los fabricantes de productos ecológicos para el cuidado de la piel formulan sus productos con materias primas vegetales, procedentes de la agricultura ecológica, lo que también significa que siempre deben ir acompañados de una certificación válida que verifique su seguridad.
Productos de origen natural
Probablemente se haya topado alguna vez con los términos cosmética natural, cosmética vegana y cosmética ecológica, pero quizá se pregunte si todos ellos significan lo mismo. ¿Qué es realmente la cosmética natural y en qué se diferencia de la cosmética «tradicional»? ¿Cómo elegir la opción más ecológica, ética o segura? Hemos elaborado una guía para ayudarte a navegar por el mundo de la cosmética natural, y de los cosméticos que se autoproclaman como tales. Después de leer este artículo, sabrá qué se entiende realmente por cosmética natural y cuáles son sus criterios.
En el mercado existe una enorme selección de cosméticos que se diferencian por sus métodos de producción, sus ingredientes y la base de valor de su marca. La cosmética natural, la ecológica, la vegana y la sintética tienen características y criterios propios.
La cosmética natural es aquella que contiene principalmente ingredientes de origen natural, procesados al mínimo. Además, se espera que los cosméticos naturales sean ecológicos y éticos durante todo el ciclo de vida del producto, desde la recolección de los ingredientes hasta la logística. Los auténticos cosméticos naturales pueden identificarse a partir de certificados (por ejemplo, Ecocert, NATRUE, BDIH) que partes independientes conceden a productos que cumplen determinados criterios tras un exhaustivo proceso de evaluación. El certificado indica al consumidor que los ingredientes, métodos de producción y envasado del producto son ecológicos y éticos. Los cosméticos naturales certificados no se han probado en animales, sino en voluntarios bajo supervisión médica. Los cosméticos naturales certificados garantizan lo siguiente